...A PUNTO DE CONVERTIRME EN HOMICIDA...

domingo, octubre 24, 2010

Por momentos pareciera que tengo tanto para decir, que no sé por dónde empezar. En realidad, no son cosas que tenga que decir, sino simplemente, cosas, que tengo en la cabeza y me comen el cerebro desde adentro como langostas. Aunque por la sensación que albergo en el pecho creo que no se trata solamente de mi cerebro, sino también de mi corazón. Creo que dentro mío pude sentir un crujido. No me atrevo a decir que algo se quebró, porque la verdad, ya no sé si puedo quebrarme más, en los más amplios sentidos de la expresión. Mi ex analista me dijo una vez que no me podía romper por el dolor, porque ya estaba rota…

Me parece que la gente que va rota por la vida como yo, o quebrada, suele tener esos agujeros por donde las cosas se le escapan, como si fuéramos vasijas viejas perdiendo agua. Lo poco que mi envase pueda poseer, siempre lo termina perdiendo, porque nunca logro emparcharme bien o del todo y tampoco tengo idea de cómo debiera hacerlo correctamente.

También creo que, o me da la sensación de que, no hay mucha gente feliz del todo. Me parece que a todos nos falta siempre algo para ser felices del todo. Quizá por eso rebote mucho siempre en nuestros oídos el ¨ no se puede tener todo ¨. Muchos tienen plata pero no tienen amor, o tienen plata pero no tienen salud o como en mi caso, no tienen un mango ni salud, pero tienen amor que los ayuda a sobrellevarla. Los que tienen guita supongo que se entretienen gastándola y los que la tienen y no tienen salud bueno, creo que esos, aunque tengan amor, son los más desgraciados, porque es como que no pueden disfrutar nada del todo. En mi caso tengo la salud justa y necesaria como para poder sufrir lo desesperante de no saber a dónde vamos a ir a parar por la falta de guita, ahora que lo pienso, creo que yo soy la más desgraciada de los ejemplos dados… no me extraña tampoco...

El hecho de la estúpida felicidad de los demás, me hace mierda. Me parte el alma tanto, pero tanto que en este momento quisiera ser la mano derecha de Hitler si pudiera y no porque odie a los judíos, gitanos o negros, sino sólo por el hecho de estar cerca de alguien que tuviera el poder de la masacre que pudiera sosegar mi odio.

¿Se sentirían como yo las personas más malas de la historia?, ¿Sentirían esta aberración por la felicidad ajena?, este sentimiento de que cada persona estúpidamente feliz y complacida le roba un poco más la posibilidad de ser feliz ellos? Creo que hay algo de eso. Creo que esa sensación podría ser la explicación de la enajenación de los comportamientos más reprobables de la humanidad. Creo que una desesperanza y tristeza inimaginables pasan antes por la mente y el corazón de alguien que vierte la sangre de otro ser humano. Tengo un poco de miedo ahora que se la verdad, porque me estoy empezando a sentir parte de esa pequeña minoría que no entendió cómo la vida funciona y que piensa que cada felicidad de los demás, me deja en la indigencia…

MINERVA FILARDI.

© Copyright 2012

4 comentarios:

Interpola dijo...

respecto a tu comment es algo mas profundo la palabra amigos, o sea para ir a soad si tengo miles de conocidos, gente de tooda la adolescencia jaaajajja , yo lo digo mas en el sentido de que he tenido muchos amigos verdaderos supuestamente y la verdad terminaron siendo todos falsos y siempre termino quedandome sola.
ya agregue el boton para los seguidores, por cierto, me encantan los colores de tu blog !

Vigésimo Otoño dijo...

Gracias!
Entonces, basándome en tu nueva rta. me siento más y más identificada con tu comment!!!
;-S

Anónimo dijo...

Me tanto conocerte...

Alejandro Juan Fatouh dijo...

No hay océanos para baúles tan bastos... El mail sigue siendo el mismo.

MIS OTROS BLOGS